Un oso negro de aproximadamente siete meses de edad fue atacado a balazos en el Municipio de Santiago, Nuevo León, provocándole heridas que ponen en riesgo su vida y lo obligaban a arrastrar sus patas traseras.
Personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Nuevo León atendieron el reporte de avistamiento y rescataron al osezno, en conjunto con personal de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León.
En el sitio, se realizó la contención del ejemplar de aproximadamente 7 meses de edad, el cual se encontraba lesionado en las extremidades traseras con exposición de músculos y tendones.
El animal fue trasladado para que personal médico veterinario tomara radiografías, pudiendo detectar hasta el momento lo que parece ser una lesión causada por arma de fuego y un proyectil dentro del ejemplar.
El oso negro recibirá tratamiento médico para buscar su recuperación y es importante señalar que hasta este momento el diagnóstico es reservado, ya que no se ha podido determinar la gravedad del daño y si el mismo es reversible.
La Procuraduría presentará la denuncia penal correspondiente ante la Fiscalía General de la República en contra de quien o quienes resulten responsables por el delito cometido contra la biodiversidad.